Guardadas quedaron las medallas, el Rojo intenso de las chaquetas y el brillante "1" en el bronce de nuestros cascos, este aniversario sería diferente.
El 1 de abril un terremoto 8,2 Richter azotaba nuestra región y la vecina región de Tarapacá, y un segundo terremoto nos volvía a remecer dejando como resultado que cerca de mil familias sufrieran con serios daños en sus hogares y miles de ariqueños con temores de nuevos sismos.
No había ánimo de celebrar sentíamos que el cóctel y las ceremonias eran una bofetada al dolor y miedo de mucha gente; por esta razón la idea de cambiar nuestras ceremonias por acciones efectivas con la comunidad prendió en nuestros corazones, la Junta General aprobó el cambio y pusimos manos a la obra.
Así entonces, la mañana del 12 de abril, cumpliendo 102 años de vida, un grupo de voluntarios junto a nuestro B1, acudieron en apoyo de la comunidad que se organizó para para crear un acceso hacia el cerro en Capitán Avalos con Yerbas Buenas, donde se creó un serio problema en las últimas evacuaciones por las alertas de Tsunami, ya que aunque se encontraban en zona de seguridad, el miedo los hacia intentar llegar a zonas mas altas. La prevención de accidentes especialmente en niños y adultos mayores nos llevó a participar de esta actividad en beneficio de la comunidad.
El día no podía completarse sin visitar la maternidad para llevar un regalo a un niño o niña nacida el día de nuestro aniversario, la sorpresa, alegría y agradecimiento de la joven pareja es indescriptible, solo podemos decir MISION CUMPLIDA... COMO SIEMPRE UN ESPECIAL ANIVERSARIO...